miércoles, mayo 23, 2007

Celebraciones pasadas

Pasó el cumple, del que no tengo todavía las fotos. Hubo diversas cámaras documentando el evento, ninguna de las cuales fue la mía. Por lo tanto, no me queda más que esperar a la buena voluntad de los asistentes. Supongo que cuando papá y Lili vuelvan a Buenos Aires, podré nutrirme de sus fotos, y así compartirlas con todos.

Lo que sí quedaron fueron muchos lindos recuerdos, más conocimientos de holandés y unas cuantas cervezas. De esto último, nos ocuparemos con Alberto.

Después de una tentativa del tiempo de cancelar el evento, logramos con Ben, uno de mis tantos tíos presentes, sacar algo bueno de la parrilla. Vuelvo a insistir, nuevamente, que los parámetros utilizados para dar ese veredicto son los holandeses, ya que el manjar estuvo compuesto por salchichas turcas (símil chorizos) y unas alitas de pollo marinadas.

Ya hacia el final de la fiesta, cuando todos teníamos la panza relativamente llena, a alguien se le ocurrió que tenía que dar un discurso. La idea creció rápidamente, y yo no tuve más remedio que acceder.

Infructuosos fueron mis intentos de decir algo en inglés. Eran demasiados los Gomes de este lado del Atlántico. Además, estuvo presente Toos, mi tía abuela, quien sólo habla holandés. Así que me mandé nomás, y el resultado fue más que respetable. Puede que la rigurosa documentación del evento de Lili me pruebe equivocado, y eso lo podrán decir los abuelos cuando vean el video en Buenos Aires. Por lo pronto, prefiero recordarlo así, como un importante hito en la vida: Mi primer discurso en holandés, ante gran cantidad de la familia Neerlandesa.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo quiero una copia del discurso!